Polígonos de baja temperatura, color y universos en la más penetrante mirada, mujeres que flotan en humo y agua, en perdidos centímetros de su propio ego. Lauren Brevner nos expone ante sus hijas, esposas y madres, figuras de pálida esperanza y sonrisa cerrada, un recorrido encriptado entre las suaves manos de las que no se atreven a mirar.